May 29, 2013

En marzo de 2003

«En marzo de 2003, en vísperas de la guerra de Irak, el papa Juan Pablo II envió al cardenal Pío Laghi, un alto diplomático del Vaticano, a Washington para pedirle una última vez a Bush que no realizara la invasión. Laghi, elegido por sus estrechos lazos con la familia Bush, resumió “de manera clara y enérgica” los temores del Vaticano respecto de lo que podía seguir a la invasión: una guerra prolongada, importantes pérdidas de vidas, violencia entre grupos étnicos y religiosos, desestabilización regional “y un nuevo abismo entre el cristianismo y el islam”. La advertencia no fue escuchada» (The American Conservative).

No comments :