September 26, 2013

Dios me ha ordenado que me quede con tu esposa

«Mahoma tenía un amigo llamado Zeid. Este hombre tenía una esposa muy bella, de la que Mahoma se enamoró. Una vez, estando juntos, Mahoma le dijo: “Ah, por cierto, Dios me ha ordenado que me quede con tu esposa”. El otro contestó: “Eres un apóstol. Haz como te ha dicho Dios, y quédate con mi esposa”» (san Juan Damasceno, La fuente de la sabiduría, libro II, cap. 101).

Racionalizar

«El intento de autojustificación [de Kermit Gosnell] es fascinante. Primero, porque habla de nuestro universal deseo humano de racionalizar todo lo que hacemos. Gosnell es un ejemplo extremo, pero es cierto que la mayoría de nosotros no solo ideamos explicaciones para nuestras faltas, sino que incluso tratamos de hacerlas compatibles con el orden moral. A Kermit no le basta con decir que lo que hizo no estaba mal: tiene que asegurar que estaba evitando un mal mayor y librando en soledad una guerra contra la pobreza (es de suponer que reduciendo la cantidad de pobres del mundo). Así, el villano se vuelve, en su propia opinión, un mártir» (Tim Stanley).

September 20, 2013

Sería bueno

«Sería bueno empezar a plantearles a los nacionalistas que, si se empeñan en quebrantar la unidad de España, que sea cada comarca o población catalana la que decida si quiere unirse a ellos o no, pudiendo las que se opongan seguir en España o incluso declarar su propia nación. Ya que los nacionalistas invocan el “derecho de autodeterminación”, ¿por qué aplicarlo sólo a Cataluña? Las provincias, comarcas y poblaciones catalanas también han de poder ejercerlo llegado el caso, siguiendo su propio rumbo si así lo desean y convirtiendo a Cataluña en el mayor queso de gruyer del mundo. Dicho sea de otra forma: si los nacionalistas catalanes quieren romper la unidad de España, que lo hagan al precio de romper la unidad de Cataluña. ¿O reclaman para ellos lo que niegan a los demás?» (Contando estrelas).

Maidana

September 16, 2013

Anonymous Us Project

Alana S. Newman, de 26 años, es la fundadora del Anonymous Us Project, un foro donde las personas concebidas por donación de gametos pueden contar sus historias. Su objetivo es hacer visibles sus necesidades emocionales y mostrar a la gente que no todos los hijos nacidos así están tan bien como les gustaría a muchos adultos (cfr. Aceprensa, 3-02-2011).

«Hemos creado una clase de personas que son fabricadas y tratadas como poco menos que humanos, exigiéndoles además gratitud con independencia de las condiciones de vida que les ofrezcamos. Mientras que a los padres de los concebidos biológicamente se les obliga a pagar los gastos básicos de su cuidado, los concebidos comercialmente reciben una reprimenda cuando se les ocurre pedir explicaciones por el vacío anónimo que sus padres biológicos dejaron tan "amorosamente"», escribe en Public Discourse.

Aceprensa

September 15, 2013

El monopolio de los medios de coerción

«El anarquista libertario no se opone por la fuerza a que una persona sea miembro de cualquier institución u organización. A lo que se opone el anarquista libertario es al tipo de gobierno civil conocido como “el Estado”, que ejerce el monopolio de los medios de coerción. Es este monopolio —quizá más que cualquier otra cosa— lo que caracteriza al Estado: su falta de asociación voluntaria, y que se arrogue el derecho de usar una fuerza indiscutida sobre todos los individuos a los que les toca vivir dentro de cierta área geográfica» (Ryan McMaken).

September 10, 2013

Entonces comenzó la persecución

«El cristianismo llegó a Japón en 1549. La Tierra del Sol Naciente estaba lista para escuchar la buena nueva cuando san Francisco Javier pisó por primera vez sus playas. Para cuando se fue, apenas dos años después, había tres mil japoneses cristianos. En los siguientes cuarenta años, esa cantidad aumentó a doscientos mil. Entonces comenzó la persecución» (Rachel Lu).

September 09, 2013

Pardocracia

«Para acercarse a la persona que realmente fue Bolívar, es bueno definir todo lo que no fue. Además de no haber sido nacionalista, fascista, franquista, antiimperialista, no fue, ni pudo ser, socialista ni comunista. Hay amplísimas evidencias de su rechazo (y su horror) a las revoluciones populares que en aquella época (sobre todo a raíz de las guerras de independencia en Haití y en la propia Venezuela, de 1812 a 1814) eran guerras raciales, guerras por motivos de estratificación social, guerras de exterminio. Una de las principales razones por las cuales Bolívar se aferró al mando de la Gran Colombia (su efímera creación) fue la angustia permanente que le producía el riesgo de la irrupción popular y el amenazante fantasma de lo que llamó "pardocracia". Hoy su actitud puede parecer racista. Y lo era —a mi juicio—, pero bajo los parámetros de un criollo del siglo XVIII, no de un darwinista social del XIX o un racista alemán del XX» (Enrique Krauze).